martes, 26 de marzo de 2013

A ti

Te quiero gris, si gris es la cara del alma,
abrazan mis sentidos los suspiros de la Alhambra.
La bruma que te envuelve devuelve al verde melancolía,
en sintonía, tu interior con el mío y su agonía.

Un romántico que equivocó el año de nacimiento.
Tú, maravilla eterna que lamenta estos tiempos.
Sentimientos en venta y conciencias tan dormidas...
pocos te comprenden, muchos te admiran.

Capturo tu imagen con mis ojos,
escojo mi pecho como almacén.
Te evoco como fiel devoto,
agoto mi tinta en este Edén.

Tú dominas la ciudad,
pero tu flor nadie ilumina;
testigo de esta sociedad
sin amor por miedo a la rutina.

Yo navegante de cielos de arena,
enlazo mi silencio a tu melodía
para acariciar con esmero tu melena,
y no pido perdón por mi osadía.

Sirena que merezca mi soledad,
da color a lo abstracto,
poder acariciar o besar
tu espalda en un abrazo.

Biko.

jueves, 21 de febrero de 2013

Converso en la lluvia

Agua de olvido,
vino de santo,
la pena en racimo,
me lleva al llanto.

Es época de cosecha,
y mi tierra yace estéril,
el invierno ya acecha;
mi corazón está débil.

¿Sobreviviré a la escarcha?
El sol ya no me alumbra,
no hay lumbre en mi marcha,
sólo encuentro penunmbra.

No sé si me libraré del yugo,
que supone convivir con Soledad,
ahora quiero exprimir el jugo
de mi triste y solitaria libertad.



Por Biko y Juanjo Campillos.

viernes, 14 de diciembre de 2012

Mi juego

Callar más, hablar menos.
Amar al mar, navegar sin remos.
Levantar el ánima, minar el miedo.
Asimilar la realidad, soñar el cielo.

Trazar versos, iluminarlos con fuego.
Dibujar un beso, domar el ego.
Rizar tu pelo, erizar tu vello.
Plasmar la postal de tu vida en un destello.

Quiero y puedo, jugar a un juego.
Escribir con sangre, quemarte como hielo.
Para entrar en mi mundo, has de ser fiero.
Hacerte sentir, ése es el duelo.

Biko.

viernes, 13 de julio de 2012

Ese lugar


Ese lugar frente al mar, donde exilio,
donde reina la tranquilidad y no es necesario el prestigio,
ese lugar ese edificio, de paredes blancas y puertas abiertas
donde no llegan tus palabras tus falsas ofertas de felicidad,
de besos que no llegan y te quieros que caen vacío
a pozos sin más agua que la de gotas de rocío.

Ese lugar donde no hace frío y tampoco calor,
donde brilla el sol que broncea mis musas,
ese lugar donde no valen excusas
sólo crustáceos se escudan en caparazones,
donde hay miles de colores
y corazones laten al ritmo de las olas,
las horas pasan lentas y se baila hasta con las farolas.

Ese lugar donde nada se para todo prosigue,
donde la felicidad no se busca se consigue,
donde nadie te persigue,
donde mi arma es de 1 milímetro de calibre y tinta azul,
donde recuerdos vuelan libres y no encerrados en un baúl,
donde la gente se idolatra y no adoran una cruz,
donde no hay ladrones ni policías,
donde si miras al cielo verás sus ojos caramelo y su sonrisa,
donde te enamoras sin premisas,
la brisa llega y no avisa y te despeina de forma graciosa,
preciosa, ese lugar donde tu cuerpo sabe a regaliz.
ese lugar donde este intento de poeta, sería feliz.

Que pena que ese lugar no exista,
que solo sea fruto de mi boli, de mi tinta...

David R.G

martes, 12 de junio de 2012

Bucanero de tu piel


Marcho a navegar entre mares de lágrimas
me considero bucanero sin espadas pero con páginas
ni te imaginas cuantos cientos de aventuras
surcando miles de mares buscando tus placeres
los colores de tu sonrisa
no pasa la vida más lenta por vivir sin prisa
pero ayuda, buscando una salida
no busques con quien pasar el resto de tus días
busca la persona que haga de tu vida ambrosía.
Yo ya comprendí que si vas de flor en flor
es tan solo porque no encontraste el mejor olor
la mejor fragancia, la experiencia
no es más que aprender de tus vivencias de tus errores
cura tus dolores cicatriza tus amores
ya que equivocarse es de humanos
pero rectificar de sabios
recuerdo el calor de tus manos
el roce de tus labios y la magia de tu mirada
en noches frías de invierno en tarde cálidas de verano
no importa donde ni cuando
ni me importa mi porvenir
tan solo aclamo
que no hay más que decir
Te amo.

David